Hace unos días hicimos una pequeña introducción al balance de blancos y las funciones que las cámaras ofrecen. Hoy nos acercamos a otra de las funciones que a veces son desconocidas al usuario poco experimentado y que, sin embargo, ofrece un mundo de posibilidades a explorar: el modo bulb o «b». El modo bulb nos permite controlar manualmente el tiempo de exposición. Simplemente eso, la cámara dejará el obturador abierto hasta que se lo indiquemos de modo que podamos hacer exposiciones de varios minutos.
Cuando usar el modo bulb
Normalmente este modo se emplea en fotografías nocturnas. Es especialmente llamativo cuando hay luces en movimiento, probando con distintos tiempos de exposición podemos convertir el tráfico en líneas de colores o capturar el movimiento de las estrellas con el pasar de las horas.
También es habitual usar el modo Bulb cuando queremos practicar la técnica del Lightpainting. Para ello debemos buscar un escenario relativamente oscuro en el que poder realizar exposiciones largas. Luego, con linternas, mecheros, bengalas o cualquier objeto luminoso, podremos empezar a movernos por el espacio creando “dibujos de luz” en el cuadro. Esta es una técnica muy llamativa y que solo requiere algo de práctica para calcular el tiempo correcto de exposición.
En ocasiones se usa el modo bulb en fotografías que no son nocturnas. Es habitual, por ejemplo usar este modo para fotografiar cascadas o agua en movimiento y obtener ese efecto difuminado que resultan tan llamativo. Sin embargo, para evitar sobreexposición en casos así será necesario reducir la cantidad de luz que llega al sensor, mediante filtros de densidad neutra.
Como sacar fotografías en modo bulb
Lo primero, es tener en cuenta el equipo. Cuando sacamos fotografías con larga exposición es esencial evitar el movimiento de la cámara. Para ello lo mejor es contar con un buen trípode y un disparador remoto. Si vamos a sacar fotos en la oscuridad, como por ejemplo fotos del cielo estrellado en movimiento, debemos considerar la dificultad de realizar un buen encuadre sin ver la línea del horizonte. Un buen nivel de zapata será la solución más sencilla. Un cronómetro y una libreta para anotar tiempos y realizar cálculos terminarán de completar el equipo.
El primer problema que encontrarás, si tu idea es fotografiar en zonas oscuras, es que el autofoco no funciona en la oscuridad. Para solucionar este problema tienes varias opciones según la foto que quieras realizar. Si aquello que deseas enfocar está lejos, puedes ajustar el enfoque a infinito. Para objetos que se encuentren a pocos metros, puedes iluminarlos con una linterna y enfocar, una vez que tengas el enfoque correcto, cambia al modo de enfoque manual y apaga la linterna. Si lo que queremos es la máxima profundidad de campo, no tendremos más remedio que calcular la hiperfocal, la distancia a la que la cámara consigue enfocar según el objetivo y la apertura. Para calcular la hiperfocal podemos consultar las tablas que hay en internet o realizar nuestra propia libreta de hiperfocales.
Calcular el tiempo de exposición es la parte más complicada, lo mejor para empezar es aplicar la llamada ley de reciprocidad. Para ello subimos al máximo el ISO de la cámara y, si no es suficiente, abrimos también al máximo el diafragma. Encuadramos y presionamos el disparador a la mitad y anotamos el valor de tiempo de exposición. Ahora nos toca hacer números, cada vez que hayamos doblado el ISO nos supone que tenemos que doblar el tiempo que hemos anotado. Si la medición la hicimos a ISO 1600, al bajar a ISO 800 tenemos que multiplicar los 10 segundos por 2, a ISO 400*4, a ISO 200*8, y a ISO 100*16. Recordamos que a mayor ISO más ruido y en este tipo de fotos se nota y mucho, por tanto siempre tenemos que trabajar al ISO más bajo:100. Los 10 segundos multiplicados por 16 nos darían un tiempo de exposición de 160 segundos (2 minutos 40 segundos). Con el diafragma nos pasa igual, multiplicaremos el tiempo por 2 por cada paso que subamos el diafragma. Si por ejemplo queremos subir 2 pasos, habrá que multiplicar el tiempo anterior por 4: 160*4 = 640 segundos (10 minutos 40 segundos). Ahí está el tiempo de exposición que necesitamos.
El modo Bulb, como ocurre con la mayoría de técnicas en fotografía, requiere tiempo y práctica. Nuestra propuesta es que ahora que se acercan las noches cálidas aproveches para aprender a dominar esta función.
1 Comment
Suena bien eso de las noches de verano.
¡Lo apunto como plan para cuando vuelva el calor!